Transpiración, irritabilidad, mareos, sensación de muerte, nauseas, pensamientos de locura y un intenso malestar mental, son síntomas de los trastornos de ansiedad .
En entrevista, el psicoanalista de niños y adolecentes Luis Teszkiewicz habló sobre los síntomas de esta enfermedad en niños, y aseguró que si la ansiedad en menores no se trata puede invadir la vida del infante, produciendo gran sufrimiento, “contra la creencia general, los niños no sufren menos que los adultos”.
“La ansiedad es la palabra que ha sustituido en los manuales de psiquiatría a la angustia, pues esta enfermedad ha sido dividida en tantos trastornos como formas tenga de manifestarse, por lo que preferimos decir que los niños con este mal se angustian”, señaló el especialista a pregunta expresa.
Además se refirió a los infantes de una forma nostálgica, cuando recibió a este redactor en su consultorio médico.
“La ansiedad es un estado de angustia y temor que no permite sosiego, y la angustia un temor opresivo sin causa precisa”, reitera el doctor, al hablar sobre el estado de angustia en los infantes.
Teszkiewicz abundó que evidentemente las manifestaciones de este mal en infantes son distintas a las de los de los adultos, pero también en los niños se pueden encontrar crisis por angustia, fobias y síntomas obsesivo-compulsivos, y dijo que la angustia está en el fondo de todos los problemas psicológicos.
El doctor pronunció que es más fácil tratar esta enfermedad en un niño que en un adulto, pues” los niños son más inteligentes que los mayores, aún sin formación académica”.
El especialista señaló tajante,” la ansiedad se puede tratar con terapia psicológica, ya que en los infantes se usa menos medicación que en los adultos”.
“Tengo muchos años de experiencia y casi todos los niños que he tratado se han curado, ya que han dejado de cubrir los términos de diagnostico del supuesto trastorno. Su angustia ha llegado a los límites que el mismo niño puede manejar, pues han aprendido a identificar las señales de la angustia cuando ésta está a punto de desencadenarse”, aseguró Teszkiewicz.
Apuntó que los trastornos más frecuentes en niños son el trastorno de ansiedad generaliza y el de fobia social, pero reiteró, “no son los únicos”.
“Los niños disponen de una menor verbalización, pero también están menos domesticados, por lo que sus manifestaciones son mas espontaneas y ricas que en las del adulto, para quien sepa escucharlos leyendo sus dibujos y juegos”.
Es tanta la incidencia de este tipo de trastornos- con 22 por ciento en la región Pacifico- que la Organización Europea para la Salud lanzó un llamado mundial, en el que asegura que por lo menos el 28 por ciento de la población en América Latina padece algún grado de ansiedad, y que este mal es seguido por los dolores de cabeza con un 13 %, los dolores musculares con 17 % y fatiga con 20 %.
También, el Instituto Nacional de Salud Mental Estados Unidos se ha unido a la lucha por que los trastornos de ansiedad se diagnostiquen a tiempo, pues ese organismo ha hecho entrever a través del articulo “Los trastornos de ansiedad” la sintomatología de cada uno de los tipos de esa patología, los cuales son: el trastorno obsesivo compulsivo, el trastorno de estrés postraumático, el trastorno de fobia social, el trastorno de ansiedad generalizada y el trastorno de pánico.
El Instituto Nacional hace referencia al trastorno de pánico: “el trastorno de pánico se caracteriza por miedo, terror, palpitaciones, traspiración, debilidad, mareos o desfallecimiento".
"Este tipo de mal algunas veces va acompañado de sensación de frio y de pensamientos irreales. A veces, las personas que sufren ataques de pánico creen que están sufriendo un ataque cardiaco, que están enloqueciendo, o que están al borde de la muerte”.
Ese organismo hace énfasis en las características de ese tipo de mal: las personas que presentan un episodio de terror no necesariamente desarrollan la enfermedad, pues nunca vuelven a sufrir otro.
Asegura que después de un ataque las personas pueden desarrollar miedo a lo que le causó el episodio afectando sus decisiones sobre su vivienda o lugar de residencia.
El trastorno de ansiedad generalizada-afirma- alude miedos sin una causa
aparentemente real, pues el enfermo pasa gran parte de su tiempo con preocupaciones a casi cualquier cosa.
”El paciente parece incapaz de liberarse de sus tensiones y preocupaciones, pues no se puede relajar, se asusta con facilidad y tiene dificultades para concentrarse”, apunta el Instituto.
Los síntomas físicos-dice- son fatiga, tensión muscular, dolores de cabeza, dolores musculares, dificultad para tragar, temblores, tics nerviosos, irritabilidad, traspiración, sensación de falta de aire y necesidad de ir al baño con frecuencia.
“El trastorno obsesivo compulsivo se caracteriza por pensamientos y rituales que causan angustia. Estas ideas repetitivas se llaman obsesiones”, señala la misma fuente.
En largo estudio, el Instituto Nacional de Salud Mental estadounidense engloba todos los tipos de trastornos de la ansiedad, y hace énfasis en que algunas obsesiones son el miedo a gérmenes, el miedo a ser heridos o a herir a otros y pensamientos perturbadores.
“Los síntomas son pensamientos o imágenes repetitivas, realización de los mismos rituales una y otra vez, pensamientos indeseados y por lo menos una hora de pensamientos y rituales”.
“El trastorno de fobia social se puede definir como el miedo a situaciones en las que hay más de una persona involucrada.
También este trastorno refiere al terror de ser observados por las demás personas y a ser juzgadas por otros individuos”, señala la institución de salud.
Por otra parte, la Universidad Intercontinental con sede en el Distrito Federal, ha efectuado un estudio, en el que afirma que los niños de entre 3 y 11 años, quienes residen en la ciudad de México , padecen algún problema de salud mental.
Estas cifras coinciden con los números de la Encuesta Nacional de Epistemología Psiquiátrica, que arrojó el mismo porcentaje de niños con esos trastornos en esta ciudad.
“Sólo uno de los pacientes con trastornos psiquiátricos acude a tratamiento”, asegura el estudio de la Encuesta Nacional en sus páginas.
Directora del Instituto Nacional de Psiquiatría, María Elena Medina Mora, sentenció que en el Distrito Federal se han incrementado los trastornos psiquiátricos por lo menos en un 20 porciento.
“La ansiedad junto con la depresión son los trastornos son los problemas que más afectan aloe mexicanos, ya que cerca de de 15 millones de personas sufren de estos males”, asegura la primera Encuesta Nacional de Salud Mental en México.
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